domingo, 8 de agosto de 2010

Canciones nostálgicamente andinas



Estoy absolutamente convencido de que la música que me agrada es la que me gustaría poder componer… tener ese don de crear música. Pero tengo tanto talento para la música como para la pintura, así que me limito a disfrutar del talento ajeno… y vaya que si lo disfruto!!!!

   Una de las cosas que mas disfruto de la música y la letra que la acompaña, son esas canciones que describen lugares, situaciones y actividades. Sobre todo si en esas estrofas describen la vida que me gustaría llevar (utópicamente). Hoy me pasaron unos temas de Los Hermanos Berbel. Gente sureña, con inspiración Mapuche por supuesto, y en este momento (14:41) disfruto de sus descripciones en mi oficina.
  La ultima vez que realmente me fui de vacaciones, hace ya dos años, compré un CD de un grupo llamado Newentru. Estaba en Lago Puelo, en el camping del Parque Nacional y en la proveeduría estaba ese disco, mirándome y llamándome para que lo lleve a recorrer mi vida. Me convenzo bastante fácil cuando un CD me llama… así que me lo llevé y lo escuché. Ese disco me acompañó varias veces en la ruta, imaginándome una vida que me hubiera gustado vivir… decía:

"un remanso del río se transforma en una laguna…
serpentean pececitos bajo un alero de musgos verdes…
se percibe el golpe seco del hacha sobre el leño…
se imaginan el sabor de verduras cocinando a fuego lento…
 sobre el pasto corren chicos descalzos y desnudos…
su piel se impregna de la esencia de la sabia raíz del suelo…
la cabaña posa entre álamos en fila…
susurran hasta con la brisa mas pequeña y nunca duermen…"

Y me veía a mi mismo rodeado de árboles moviéndose al compás del viento… Newentru, es un conjunto de música sureña y por lo tanto muy inspirada en grandes cantores del sur, como los hermanos Berbel y Rubén Patagonia. Varias de las canciones que tiene el CD que me traje del sur son de autoría de éstos hermanos y ahora disfruto de las versiones originales…. Y la verdad que lo disfruto mucho.
 Casi todas las canciones de este tipo describen con lujo de detalle, paisajes, vivencias y pensamientos. Me gusta tener la posibilidad de probar nuevas músicas y descubrir cosas como esta. Tiene mucho de folklore y sinceramente no soy muy fanático del mismo, pero debe ser que me estoy poniendo viejo porque me gusta mucho la música.
 Por ejemplo, ayer fue el cumpleaños de un colega, el cual hizo un asado en la casa y vinieron todos… con guitarras y acordeón. Chamamé toda la noche…. Y ahí estaba Sam aplaudiendo jeje… sin sapucai y sin alcohol.
 Me acuerdo cuando era chico que mi viejo escuchaba mucho folklore y bastante chamamé… y yo lo odiaba. Evidentemente la gente crece y ahora aprecio la música, porque debe ser muy difícil tocar el acordeón como lo tocaba Miguelito anoche, o la guitarra y cantar a la vez; yo no puedo, por ahora.
 Claro está que todos los días uno crece un poco mas y yo por lo menos me siento con la bondad de tener la tolerancia para descubrir nuevas cosas.
 Y gracias a esa manera de pensar, ahora disfruto de una música de una calidad impresionante, tal es así que esta noche me fijo en internet cuando actúan estos genios… para ver si los puedo ir a ver.
  Todos tenemos etapas, incluso en los gustos musicales. Nunca me va a dejar de gustar KISS, ni Rammstein, pero además de tirar fuego por la boca, me gustaría aprender las melodías de estas obras de arte que tengo el placer de disfrutar.
 Nostalgia andina, se llama cuando me dan ganas de irme pal´ cerro… esta música me tira para eso lados…  pero en lugar de imaginarme hachando un árbol para conseguir leña para pasar el invierno… me imagino manejando por caminos de cornisa un par de días durante mis “vacaciones” con Rubén Patagonia y los Hermanos Berbel a full en el estéreo… también es utopía.

PD: Aclaración: lo escribí en la oficina pero hoy es domingo y estoy en casa...

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