Miércoles 16 de Septiembre de 2009 a las 18:00 hs.
70 Km. /h
Esa debería ser la velocidad máxima permitida para fabricar autos de serie. Claro que en cierto modo seria algo medianamente aburrido a quienes nos gusta la velocidad, pero ayudaría mucho a evitar accidentes. Pero ese no es el motivo por el que estoy escribiendo esto. Creo que la gente sería mucho más feliz si manejaría a 70 Km. /h.
Hace muchos años la gente no andaba a 130 en la autopista ni los colectivos de larga distancia cumplían rigurosos horarios para llegar a sus destinos. Sin embargo llegaban a horario a los trabajos y la vida estaba bien así.
Hoy me pasa que cuando tengo que ir a Bs. As. me tomo un micro a las 21:00 y a la madrugada del día siguiente estoy en casa (Pilar, Prov. de Bs. As.) tomando mates. ¿Y cuál es el problema? Muy sencillo: me pierdo del viaje. Subo al micro, me dan la cena, escucho un poco de música y duermo. Al día siguiente me despierto el la parada y me bajo. Se perdió la mística del viaje. ¿Acaso uno no viaja por la aventura? Mas allá que sea un viaje rutinario. Pero ese no es el motivo por el que estoy escribiendo esto. Creo que la gente sería mucho más feliz si manejaría a 70 Km. /h.
Esa velocidad es la mitad de la de un auto promedio. Entonces ¿perderías el doble de tiempo en llegar al trabajo, a la facultad, a tu casa, a una fiesta? ¿O tendrías el doble de tiempo para pensar en como rendir mejor en el trabajo, mas tiempo para estudiar para la facu (si alguien te lleva), para llegar mas relajado a tu casa… Obviamente que la Policía, los Bomberos, las Ambulancias no entraría en este comentario.
Creo que la gente sería mas feliz si los autos no podrían ir mas rápido que 70 Km. /h. Además el consumo de combustible seria menor y eso ayuda al medio ambiente.
¿Y quién soy yo para suponer que seriamos mas felices si bajáramos la velocidad?: alguien que se tomo el trabajo de ir a 70 Km. /h.
Resulta que todos los días hago el mismo camino de 60 Km. entre el pueblo donde vivo y la obra donde trabajo. Alrededor de media hora me toma ese trayecto y hace más de un año que lo hago. Desde luego que lo conozco de memoria al paisaje. Pero en realidad a 120 Km. /h no se puede apreciar mucho el paisaje.
El pasado sábado llegue temprano a la obra y era un lindo día feo. Estaba lloviznando. Así que no se puedo hacer nada de marcaciones en el terreno, y como mi trabajo de oficina lo tengo medianamente adelantado decidí relajarme un poco. Al medio día hice 35 Km. para comer un Surubí al Roquefort y después de comer volví a la oficina. Eran las tres de la tarde y no quedaba nadie en la obra. Así que emprendí el regreso a casa.
Pero tenía una agradable sensación de paz y en realidad no tenía demasiado apuro para llegar a casa. Baje la ventanilla, puse música andina y empecé a manejar. 70 Km. /h fue la máxima velocidad que alcancé. Me dispuse a apreciar el paisaje y a baja velocidad baya que cambia la perspectiva. Ciertamente vi muchas otras cosas que a 120 no las hubiera visto. Una familia de chanchitos cruzando la ruta muy placenteramente, un pájaro muy raro que no sé como se llama y que cuando le iba a sacar una foto se fue volando y en definitiva un paisaje nuevo. Generalmente la lluvia te lleva a levantar los vidrios de la ventanilla. Pero yo no. Baje el vidrio y los gotas salpicaban mi rostro. Además de lo que se ve, también se escuchan cosas. Muchos sonidos que si no bajas los vidrios no los escuchas. Insectos, animalitos… el viento.
Absolutamente recomendable. Tarde el doble de tiempo, pero gane mucho más.
A 70 Km. /h el paisaje se aprecia de una forma completamente diferente. Tal vez en la vida, si se “manejara” mas lentamente se podría ganar mucho tiempo y apreciar la vida desde una mejor perspectiva.
Esa debería ser la velocidad máxima permitida para fabricar autos de serie. Claro que en cierto modo seria algo medianamente aburrido a quienes nos gusta la velocidad, pero ayudaría mucho a evitar accidentes. Pero ese no es el motivo por el que estoy escribiendo esto. Creo que la gente sería mucho más feliz si manejaría a 70 Km. /h.
Hace muchos años la gente no andaba a 130 en la autopista ni los colectivos de larga distancia cumplían rigurosos horarios para llegar a sus destinos. Sin embargo llegaban a horario a los trabajos y la vida estaba bien así.
Hoy me pasa que cuando tengo que ir a Bs. As. me tomo un micro a las 21:00 y a la madrugada del día siguiente estoy en casa (Pilar, Prov. de Bs. As.) tomando mates. ¿Y cuál es el problema? Muy sencillo: me pierdo del viaje. Subo al micro, me dan la cena, escucho un poco de música y duermo. Al día siguiente me despierto el la parada y me bajo. Se perdió la mística del viaje. ¿Acaso uno no viaja por la aventura? Mas allá que sea un viaje rutinario. Pero ese no es el motivo por el que estoy escribiendo esto. Creo que la gente sería mucho más feliz si manejaría a 70 Km. /h.
Esa velocidad es la mitad de la de un auto promedio. Entonces ¿perderías el doble de tiempo en llegar al trabajo, a la facultad, a tu casa, a una fiesta? ¿O tendrías el doble de tiempo para pensar en como rendir mejor en el trabajo, mas tiempo para estudiar para la facu (si alguien te lleva), para llegar mas relajado a tu casa… Obviamente que la Policía, los Bomberos, las Ambulancias no entraría en este comentario.
Creo que la gente sería mas feliz si los autos no podrían ir mas rápido que 70 Km. /h. Además el consumo de combustible seria menor y eso ayuda al medio ambiente.
¿Y quién soy yo para suponer que seriamos mas felices si bajáramos la velocidad?: alguien que se tomo el trabajo de ir a 70 Km. /h.
Resulta que todos los días hago el mismo camino de 60 Km. entre el pueblo donde vivo y la obra donde trabajo. Alrededor de media hora me toma ese trayecto y hace más de un año que lo hago. Desde luego que lo conozco de memoria al paisaje. Pero en realidad a 120 Km. /h no se puede apreciar mucho el paisaje.
El pasado sábado llegue temprano a la obra y era un lindo día feo. Estaba lloviznando. Así que no se puedo hacer nada de marcaciones en el terreno, y como mi trabajo de oficina lo tengo medianamente adelantado decidí relajarme un poco. Al medio día hice 35 Km. para comer un Surubí al Roquefort y después de comer volví a la oficina. Eran las tres de la tarde y no quedaba nadie en la obra. Así que emprendí el regreso a casa.
Pero tenía una agradable sensación de paz y en realidad no tenía demasiado apuro para llegar a casa. Baje la ventanilla, puse música andina y empecé a manejar. 70 Km. /h fue la máxima velocidad que alcancé. Me dispuse a apreciar el paisaje y a baja velocidad baya que cambia la perspectiva. Ciertamente vi muchas otras cosas que a 120 no las hubiera visto. Una familia de chanchitos cruzando la ruta muy placenteramente, un pájaro muy raro que no sé como se llama y que cuando le iba a sacar una foto se fue volando y en definitiva un paisaje nuevo. Generalmente la lluvia te lleva a levantar los vidrios de la ventanilla. Pero yo no. Baje el vidrio y los gotas salpicaban mi rostro. Además de lo que se ve, también se escuchan cosas. Muchos sonidos que si no bajas los vidrios no los escuchas. Insectos, animalitos… el viento.
Absolutamente recomendable. Tarde el doble de tiempo, pero gane mucho más.
A 70 Km. /h el paisaje se aprecia de una forma completamente diferente. Tal vez en la vida, si se “manejara” mas lentamente se podría ganar mucho tiempo y apreciar la vida desde una mejor perspectiva.
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